Mirando el mar




El mar golpeaba bravío
Con olas desmesuradas,
Las rocas oscuras de la playa.

El cielo parecía estallar
En centellas y fuertes ráfagas
Para en revueltas aguas terminar.

La frágil embarcación
Era hoja en la tormenta.
Capricho de la inmensidad,
Alimento del desconsuelo,
Con un cierto destino final.

En igual suerte me debatía
Entre oleadas del huracán,
Que la conciencia crearía
Para castigar sin piedad.

Para gritar lo que no decía,
Para morir antes que hablar.

Así me dejé llevar,
Por mares embravecidos,
Antes que me dijeras
Que no me amarías más.

2011


Publicada anteriormente en 2011
Publicada en 2014

Comentarios

  1. y si...después de eso solo queda el mar
    y el sielncio ...
    todo se aleja y a la vez lo que era lo auténtico regresa a llenar lo nunca vacío...
    bss

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    Respuestas
    1. Tú sabes que el mar es un poderoso testigo. . .Abrazo, amiga.

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  2. Luchar por el amor.
    Bonito poema,, besos

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Gracias por leer mis poemas, una forma de compartir sentimientos y emociones.